¡AGUA VA...!

Tras una campaña de acoso sin piedad en pro de que fuéramos al Aquapark, y tras comprobar que las predicciones meteorológicas eran adecuadas para la empresa, allá que nos fuimos; eso sí, los del tiempo no dan una, porque de ese sol cual güevu fritu, nanai... El día en lo climático fue una especie de juego en el que tan pronto parecía que se dejaba orbayar, como que el sol quería imponerse. La tarde sí que fue un poco mejor y, como cabía esperar, los toboganes quedaron hoy un poco más erosionados gracias al tesón y convencimiento en su uso de nuestros aguerridos bañistas. Allí mismo dimos cuenta de tres nobles empanadas tres, y tras otra sesión vespertina de baño, nos fuimos a Coruña y visitamos la Torre de Hércules. La temperatura era magnífica y el lugar, al borde del mar, inmejorable, así que nos pareció oportuno tener un momento de oración en tan inmejorable lugar, dirigida por Alberto, y de nuevo con el valor de la contemplación como telón de fondo.
Vinieron con hambre así que la cena cayó rápido y de noche, la esperada Noche de Terror. Mi felicitación a los monitores más jóvenes que la prepararon porque consiguieron que más de uno se dejara la garganta dando gritos del miedo que pasaron...
Y la lluvia llegó. Y ahora están rendidos y calladitos a la espera de la gran noche de mañana.
Breve resumen pero mi neurona y media no da para más. Os dejo unas fotos que, sabido es, valen más que mil palabras.
Perbes Press informando, como siempre...
A seguir bien.